¡Ah que cosas, de como nuestra policía mexicana a veces se pasa de veras! sino es que de vez en diario se pasa de veras, primero dan muestras de violencia y abuso de autoridad y después averigüan si el sospechoso es el culpable.

Hace unas horas, mi amigo el Morales y yo nos disponíamos a ir a cenarnos unas hamburguesas al carbón, después de eso comprar un botellón de agua y un par de chelas.

Ibamos por una de las avenidas del fraccionamiento donde vivimos, y un vocho blanco nos rebasó, puse atención del vocho porque llevaba un golpe en la defensa trasera, algo que es raro de ver en los vochos :), antes de una curva se metió en una calle, avanzamos unos treinta metros, y en eso noto que una patrulla venía detras de nosotros, le dije al Morales “hazte a la orilla, viene una patrulla y parece que nos quiere pasar”, el Morales se detuvo, en eso la patrulla que venía se detuvo justo detrás y otra patrulla apareció en frente de nosotros con las luces sobre nuestros rostros, un policía salió corriendo hacia el lugar del pasajero, que es donde iba yo, gritando “¡bajate cabrón!” abrió la puerta y con bastante violencia me bajó del vocho (el Morales después me dijo que mientras me estaba bajando a la fuerza, el policía sacó la pistola, la verdad yo ni cuenta me di) con bastante fuerza, me aventó hacia el vocho gritando “arriba las manos” y con bastante rudeza me revizó, creo que con la adrenalina ni siquiera sentí los madrazos, el Morales, le preguntaba a otro policía “¿que pasa? aquí traigo mi identificiación, ¿quieres verla?”, en eso recordé el vocho que antes nos había pasado, les dije “nos confunden, un vocho blanco se metió antes, traía un golpe en la defensa”, ellos gritaron “¡saca la portatil!” me imagino que se referían a una laptop, sus radios sonaban, y otro tercer policía escuchaba, creo que el número de placas y la descripción de un golpe en el vocho sospechoso, la patrulla que estaba atrás al escuchar esto se retiró y se dirigieron hacia la entrada por donde se había metido el otro vocho y que ya había mencionado, en eso dijeron los policías “¡disculpenos, pero ponganse en nuestro lugar!” porque el Morales no paraba de decir “¿que pasa? y ¿porque le sacas la pistola a mi cuate?”, unos segundos después se dirigieron hacia donde les habíamos indicado que se había metido el otro vocho, sólo dijeron “dispensenos”.

Bueno, creo que está bien que hagan su trabajo en situaciones como estas, pero ahora si nos tocó la mala suerte de ser sospechosos, ni pex.

Vaya aventura la de este día, y las chelas que pensabamos tomarnos por puro gusto ahora también nos están quitando el inche susto :P